DÍA DEL LIBRO – LA BIBLIOTECA NOS MANDA A LA PORRA
Nuestra biblioteca está harta de que los alumnos sean tan participativos y les «manda a la porra», aunque solo sea por unas horas.
Aprovechando la ocasión, aquí os dejamos el origen de tal expresión:
En los Tercios de Flandes, el sargento mayor de cada Tercio dirigía a
sus hombres moviendo un gran garrote que recibía el nombre de porra.
Cuando una columna en marcha hacía una parada en el camino, el
sargento mayor hincaba en el suelo la porra distintiva para simbolizar
la parada. Cerca de ella, se establecía la guardia, que se encargaba
de custodiar los símbolos más preciados del Tercio: la bandera y el
carro donde se llevaban, cuando había, los caudales. También quedaban
bajo su vigilancia los soldados que estaban arrestados, que durante ese
descanso debían permanecer sentados en torno a la porra. Eso equivalía
,por tanto, a un arresto.
Esta sorprendente frase pasó a engrosar la riqueza léxica del
español, originándose así el actual y despectivo ¡vete a la porra!